miércoles, 4 de abril de 2018

EL AMOR ES UNA DAGA EN EL CORAZÓN


El amor es una daga en el corazón. 
Eso es lo que se ve en esta foto publicitaria. 



Pero diga si no es verdad. 
¿A quién no se le han atravesado dagas, cuchillos, machetes, cruces, crucetas, filos, espadas cuando se enamora y sangra cuando se despide? ¿Desde hace cuánto llevamos una cortada en lo más profundo, que no nos deja olvidar la historia vivida? 
“Mi historia entre los dedos”, qué imagen más cursi. La cursilería es un acto de cobardía, debería rezar en los portacabezas de los buses, en esos que se ponen sobre el espaldar.
Entre espalda y pecho late el corazón, con son propio. Apropiarse de los cinco sentidos de alguien, del “alguien significativo”. El amor tiene significados, y rimas, y juegos de palabras, y búsquedas. 
“Te busco, perdido entre sueños”, como cantaba la gran Celia, la "Guarachera" de Cuba. Cubano el alma de Ernest Hemingway, cuando decía “El hombre tiene corazón, aunque no siga sus dictados”. 
Dicto en este momento lo que va se desangrando a través de las palabras, de las mismas que usó Cortázar al escribir el Capítulo 7 de “Rayuela”: Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano”. ¿Será a la misma comisura a la que le habla Piedad Bonett?: “Boca para los besos dibujada / donde duerme tu lengua tentadora. / Todo el vino del mundo está en tu boca, / todo el pecado y la inocencia toda”.
Esto salió publicado en la revista del almacén de maquillajes y perfumes La Riviera. Maquillo la ansiedad ante la vida y la presento en empaque pequeño, como los perfumes finos que venden. “Son tus ‘perjúmenes’, mujer”, que nos cantan y nos encantan cuando nos tienen ganas. 
Título en El Tiempo: “Tenemos amor y ganas”. Eso lo dijo un futbolista y lo ratifican las parejas. ¿Envidia? De la buena, porque son envidiables las parejas que se tienen ganas en estos tiempos de escasez emocional. La emoción es el primer impulso que se siente ante el amor. 
No, no: el amor es un sentimiento. 
“El corazón late a mil”. Debe ser lo único que ahora está a mil, porque no hay economía sentimental que se mantenga a esos precios. “El petróleo alcanzó los 63 dólares por barril la semana pasada por motivos de ‘satez’ (¿sensatez?) económica en sus dos terceras partes y de locura política en el tercio restante”. El amor es un activo: es el combustible del alma, pero es un activo políticamente incorrecto. 
Y no hay sensatez alguna: le jode la cabeza a muchos. Sea quien sea. Cualquier persona; no importa si es político o mendigo. No distingue género ni condición ni procedencia. Como proceden Romeo y Julieta en su última sesión de amor. 
Por eso es una daga en el corazón.

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